“Elevator” y “Subway”, por su parte, son los anuncios que la oficina madrileña de McCann ha aportado a esta campaña mundial. En el primero de los dos, la trabajadora de un hotel y una estrella de la música quedan atrapados en un ascensor. Su historia, que se desarrolla en torno a una Coca-Cola, busca romper las barreras entre las diferentes clases sociales (y cuenta con una parte interactiva en YouTube en la que el usuario puede acceder a más contenidos e incluso jugar con la velocidad del vídeo). El segundo de ellos, que se desarrolla en el metro, muestra cómo un ejecutivo del sector de la música descubre a una estrella en una estación del suburbano.

La cuarta de las películas, “Eyes closed” ha sido creada por Ogilvy & Mather México. Con ella, Coca-Cola anima a la gente a descubrir esos momentos que merece la pena disfrutar, como su título indica, con los ojos cerrados.

La campaña, que sigue con la estrategia de marca única lanzada por el anunciante el año pasado, promociona las marcas Coca-Cola, Coca-Cola Zero, Coca-Cola Light y Coca-Cola-Life.