En colaboración con la oficina de McCann en Estocolmo, y según publica ‘Contagious’, la firma ha presentado una campaña llamada ‘Houdini Menu’.

Tras retirar los elásticos de las prendas, los materiales utilizados en su ropa han conseguido, en solo seis meses, convertirse en dióxido de carbono o agua. Mezclados con otros componentes, y gracias a la sabiduría aportada por Gunnar Eriksson, del que se dice que es uno de los mayores expertos en abonos de los países escandinavos, Houdini ha creado un abono que se ha utilizado como fertilizante de una serie de verduras.

El cocinero Sebastian Thureson se ha encargado de diseñar una cena vegetariana con los productos nacidos de la tierra. El mes pasado, Houdini invitó a un grupo de personas a disfrutar de las creaciones de Thureson en un restaurante de la ciudad de Estocolmo.

Por otro lado, y por la compra de cualquier producto de su nueva colección, la firma está regalando un saco de abono y la receta de la cena diseñada para la ocasión.