Dulceida es una de las influencers con las uqe L'Oréal ha trabajado en nuestro país

Este movimiento en su estrategia, según publica The Drum, se concreta en un proceso de tres pasos con el que busca aportar “autenticidad” a sus acciones de marketing con micro-influencers y evitar algunos fraudes como el de colaborar con personajes populares de la red que han construido su base de seguidores a partir de la compra de los mismos.

El proceso se concreta en los siguientes tres pasos:

- Para encontrar a los influencers menos conocidos, L’Oréal escanea la plataforma en busca de personas que mencionen alguna de sus marcas o que en sus publicaciones hablen sobre algunos de los problemas dermatológicos en los que sus productos pueden ayudar, como el acné. Una vez localizadas, una herramienta analiza sus perfiles para buscar pistas sobre fraude. De esta manera con capaces de realizar una selección del 80% de las cuentas con las que trabajan en Instagram.

- Para el 20% restante, la compañía recurre a un sistema de comprobación más manual. Para ello, L’Oréal ha desarrollado un reglamento que incluye instrucciones para que su plantilla de social media sea capaz de seleccionar con éxito a los influencers con los que quieren colaborar.

- Mediante la colaboración con una compañía ajena a L’Oréal, se analiza el entorno del influencer antes de firmar un contrato. Se analizan aspectos como las publicaciones que anteriormente han hecho en internet: no solo en Instagram, sino también en foros, blogs o cualquier página web.

Entre otras marcas, L’Oréal Active Cosmetics es propietaria de Vichy, La Roche Posay o Skinceuticals.