La pandemia se cebó con el sector de la hostelería y el turismo provocando una caída en el consumo, ventas y producción de las cervezas en España. La situación no mejoró en el 2021 cuando la crisis del coronavirus empezaba a remitir y las medidas de confinamiento parecían relajarse un poco.

Esta situación afectó especial a Voll-Damm, cerveza especial de doble mata que operaba en un mercado en el que la variedad más consumida era la lager. Para recuperar su notoriedad y su posición en el mercado, Voll-Damm lanzó una campaña de la mano de Oriol Villar y con Arena Media, protagonizada por el actor Luis Tosar, que popularizó e hizo suya la frase: “No amigo, no todas las cervezas son iguales”.

En ‘El arrepentido’ se mezclaba la estética cinematográfica con el humor y se vinculaba a ocasiones de consumo relacionadas con la gastronomía. De hecho, debido a las características del proyecto se quiso romper la monotonía de la pauta publicitaria habitual y, tanto en televisión como en digital, se priorizó la pieza de duración larga para conseguir mayor visibilidad e impacto.

En una segunda fase – la campaña tuvo una duración de un año- se introdujo una pieza corta para generar mayor frecuencia y, además, se incluyeron contenidos en los podcast.

La nueva comunicación de Voll-Damm consiguió su objetivo: logró mantener su liderazgo en la categoría, ganar cuota de mercado y alzarse con los mejores datos del histórico en atributos relacionados con la calidad y el sabor. Asimismo, la marca incrementó la distancia respecto a su inmediato competidor, recuperó los niveles de funnel de consumo de 2019 y, entre los jóvenes, mejoró la conversión de prueba a consumo habitual.

Voll-Damm creó con ‘El arrepentido’ una nueva forma de facilitar el recuerdo y de hacer y contar.