En su blog, Twitter explica las razones por las que durante estos años han congelado o restringido el acceso a determinadas cuentas: “Si desde Twitter detectamos cambios significativos en el comportamiento de una cuenta podemos congelarla y contactar con el propietario para confirmar si aún tiene control sobre la misma. Esos cambios de comportamiento pueden incluir tuitear un gran volumen de respuestas o menciones no solicitadas, tuitear links engañosos, o si un gran número de cuentas bloquean una cuenta después de que las haya mencionado. A veces también podemos bloquear una cuenta si vemos combinaciones de emails o contraseñas de otros servicios publicadas online y creemos que esta información puede poner en riesgo la seguridad de la cuenta (por lo que requerimos cambiar las contraseñas por protección). Hasta que confirmamos que todo está en regla podemos bloquear esa cuenta, que no podrá tuitear o ver anuncios”.

Así pues, señala la compañía en un comunicado, como resultado de la eliminación de estas cuentas congeladas del recuento de cifras de seguidores de perfiles en todo el mundo,  el número de seguidores que se muestra en muchos perfiles puede disminuir. Y, aunque los cambios más significativos tendrán lugar en los próximos días, se explica en el blog de la compañía, las cifras de seguidores podrían continuar variando de forma regular como parte este proceso. No se trata, aclaran, de perfiles falsos creados por robots, sino que, en la mayoría de los casos, estas cuentas fueron creadas por personas reales, “pero no podemos confirmar que el usuario que la abrió originalmente tiene aún control y acceso a ella”.

Por otra parte, la retirada de cuentas congeladas de las cifras de seguidores no tiene ningún impacto en la cifra de usuarios mensuales activos o usuarios diarios activos, explican, porque las cuentas bloqueadas que no hayan reseteado su contraseña en más de un mes no se contabilizan en estas métricas, aunque reconocen también que la eliminación de algunas cuentas “podría afectar las métricas que anunciamos públicamente”.

La medida, dicen, forma parte del “esfuerzo que Twitter está realizando en todo el mundo para generar una mayor confianza y promover una conversación saludable en la plataforma. Este ejercicio de transparencia permitirá que las cifras de seguidores, que son visibles para todo el mundo y usadas como referencia de relevancia, sean más precisas y fiables”.