En España, según el INE, hay 4,38 millones de personas con discapacidad; es decir, casi el 10% del total de población, lo que afecta al 17,9% de los hogares de este país. Son más mujeres que hombres, 58% frente a 42%. Y por edades, la mayor incidencia, especialmente en hombres, es hasta los 34 años.

Más de la mitad de esta población, un 55,7%, declara discapacidad motora, un 27% discapacidad auditiva, y un 23%, visual.
En 2022, y después de que se modificara la ley sobre Derechos de las personas con discapacidad, se reconoció, por primera vez, que son sujetos activos de la vida en sociedad y titulares de derechos.

Si hay dos derechos esenciales para asegurar que sean sujetos activos son la educación y el empleo. Ambos deben ser garantizados por el estado, pero aquí las empresas también pueden jugar un papel importante.

Si miramos las cifras, hay mucho trabajo por hacer. En educación, por ejemplo, las tasas de analfabetismo entre la población discapacitada llega al 2,3%, mientras que la media para la población general es del 0,5%. Y si nos vamos al otro extremo, en el de la educación superior, solo el 1,5% de los estudiantes de grado son discapacitados.

En el entorno laboral, las cifras no son mejores. La tasa de empleo de las personas con discapacidad, otra vez según el INE, es del 26,9% frente al 66,3%, que es la tasa del resto de la población.

La población con algún tipo de discapacidad, no solo es numerosa y ahora ya, con derechos reconocidos; además es fuente de oportunidades para que las empresas puedan mostrar su grado de compromiso social y también encontrar nuevos segmentos de mercado.

Esta es la premisa sobre la que reflexionan Elena Díaz-Alejo Rodríguez (Public Affairs & Corporate Communications en Samsung) y Javier García Pajares (Embajador de marca de Ilunion) en este nuevo episodio de "Hoy no es mañana".