Según publica ‘PSFK’, KFC ha colaborado con el buscador chino Baidu para el desarrollo de una máquina que utiliza ‘software’ de reconocimiento facial para determinar tanto la edad aproximada del cliente como su género y expresión.

Tras analizar estos datos, el sistema creado genera un menú personalizado para cada uno de los clientes. Como el sistema no analiza los gustos del consumidor, el menú que se crea cada persona incluye varias opciones de modo que pueda seleccionar lo que más le apetezca entre los productos mostrados.

KFC es una marca que habitualmente apuesta por iniciativas bastante diferenciadoras. Sirvan como ejemplo algunas acciones llevadas a cabo durante los últimos meses como el lanzamiento de una vela con olor a pollo, de un esmalte de uñas con sabor a pollo y de una crema de protección solar que, como no podía ser de otra manera, estaba perfumada con aroma de pollo.