El consumidor evoluciona, y vive ciclos como lo hacen la sociedad, la economía, los mercados y los productos. En la reciente y corta historia de la época consumista, el consumidor primero fue local, luego abrió fronteras y fronteras y se convirtió en global, luego dio un pasito atrás y fue glocal y ahora retoma sus actitudes más locales.

El término locasumer los define y nos apunta que son todos aquellos individuos que por una u otra razón social, razones que luego veremos, realizan sus compras y consumos en su entorno, bien en su barrio o bien consumiendo sus productos locales o autóctonos. Las razones sociales a las que antes hacia referencia parten básicamente de dos vertientes. Por un lado, y en una fase más inicial en el tiempo y como contratendencia a la globalización que nos ha invadido en los últimos años, surge un colectivo de gente en defensa de su entorno cercano. Entorno que le proporciona seguridad y confort reafirmando su identidad con los suyos. Una de las muchas formas de transmitir esa actitud es consumir en su entorno habitual, en comercios tradicionales. Se revitalizan o se recrean los clásicos colmados y comercios de barrio, como se recupera el nido y los valores tradicionales y de familia.Ver el artículo completo con imágenes y enlaces activos aquí.