“Más que superar esta crisis, vamos hacia un cambio de modelo”. Pronunciaba esta frase no Cristóbal Montoro sino Pablo, curtido monitor de SUP, el deporte marino de moda, frente a un plato de raons fritos, peces que se capturan en las costas baleares al final del verano. El fútbol enseñó al público lo que era una cláusula de rescisión. Con la crisis económica nos estamos convirtiendo en unos analistas económicos de nivel tertuliano radiofónico. Antes en el ascensor comentabas el tiempo. Ahora hablas sobre rescates, primas de riesgo o participaciones preferentes.

Pedaleando tras el aperitivo mediterráneo, no dejaba de pensar en la frase de Pablo. El día a día demuestra que las recetas económicas de un deportista con piercings y tatuajes tienen mayor utilidad que las de un premio Nobel. Además Pablo es consistente con su predicción, porque vive en una autocaravana en la playa y es funcionario en excedencia de una de las entrañables y arruinadas autonomías celtíberas.


Por otro lado, la bicicleta que me transporta parece holandesa porque el manillar me llega hasta mitad de la caja torácica, tiene seis marchas y pesa, a ojo, dos arrobas. Y es eléctrica. No hay una cosa más inquietante para el ciclista entre pro y globero que la bici eléctrica. Cuando uno discute desde el integrismo frente a los early adopters de este novedoso invento, se agotan los argumentos y te sientes como un viejuno defensor de la casete o el gazpacho exento de tetrabrik. La bici híbrida casi no gasta, das los pedales que quieras, llegas mas lejos, subes las cuestas sin cansarte y te permite entrenar cuando estás lesionado… ¡¡hasta puedes hacer el camino de Santiago sin sufrir!! (suprema herejía ciclo-turístico-religiosa)


Híbridos ha habido siempre; el raon, lorito o galán, parece una mezcla entre lenguado y salmonete y hasta cambia de sexo a la mitad de su vida piscícola (si no lo han frito antes) . Por cierto, que como es improbable un cambio de sexo espontáneo en los representantes oficiales de la clase empresarial que se reúnen con el Rey, impulsan y promueven la marca España o se amigan con nuestros tutores germanos, sería conveniente valorar la hibridización femenina entre sus filas. Por reconocimiento práctico a la aportación de las mujeres en esos ámbitos y para que no se nos caiga la cara de vergüenza.


Nota: los que se dedican promover la marca España por favor, ya pueden poner el turbo, no tanto de cara al exterior, sino para generar con urgencia brand love de puertas adentro, mas allá de las históricas e imprevisibles hazañas de la roja.


Este verano han aparecido dos verbos de diseño en los superventas mediáticos: perimetrar e hibridizar. El primero nadie sabe exactamente lo que quiere decir, pero connota que todo esta bajo control y que quien lo utiliza es un experto en la materia, por lo que los políticos lo han usado a destajo en la penosa epidemia incendiaria estival.

Gama completa


Toyota es el culpable de la popularidad del segundo. Probablemente la campaña perdure entre las emblemáticas del automóvil, como aquellas en que Audi se hizo con el concepto 4X4 en turismos, o BMW se identificó como la opción para los que les gusta conducir. A la sombra de la eficiencia reclamada por la crisis, la campaña de Toyota nos vende una gama completa, que es mas astuto que hacerlo con cada modelo individual. Además posiciona a Toyota como el fabricante de automóviles de referencia en híbridos. Si quieres un cereal, Kellogg’s. Si quieres un refresco, Coca-Cola. Si te molan los coches híbridos, ya empiezas a saber cual es tu marca.


La hibridización será casi seguro un ingrediente transversal en el modelo post crisis. Por ejemplo, en la vida laboral. Mi amigo Enrique Navarro saca adelante su microagencia, pero cada vez le ocupa mas tiempo enseñar a bucear. Hay empleados de banca que son profesionales del póker nocturno. Presidentes de multinacional que producen y comercializan miel extraordinaria. Lo único que escasea son políticos con experiencia laboral, con alguna excepción, como la que representa el brillante e imperturbable Luis de Guindos, que ha trabajado en Lehman Brothers y que igual vuelve allí cuando deje de ser ministro.


La hibridización reciente que mas ha influido en el hormiguero global es la que practicaba el difunto Steven Jobs, quien además de ir descalzo como mi amigo el monitor de SUP, vivía en el cruce de la tecnología y las humanidades. Para tener la generación mas preparada del próximo escenario deberíamos tener carreras universitarias que replicaran estas intersecciones. Fuera ya las hay, como el Bachelor en Arts&Sciences de UCL, cuarta universidad del mundo según el ranking QS, www.topuniversities.com, recientemente publicado (la primera universidad española que aparece está en el puesto 176)
David Fromkin es un hibrido mas tradicional de abogado e historiador y uno de los pocos que ha resumido de un modo talentoso los 6.000 años de historia de la civilización en poco mas de 200 paginas en The way of the World. Hasta le sobra espacio para hacer la previsión de lo que será el siglo XXI. La hibridización no siempre genera resultados rompedores: las previsiones de Fromkin, hechas a finales de los Noventa sobre el modelo que estará vigente en este siglo afirman que continuará siendo el de los Estados Unidos.

www.pedroagarcia.wordpress.com