La herramienta, según una información de ‘Business Insider’ a la que hace referencia la revista británica ‘Campaign’, ha sido desarrollada de manera interna por el equipo de compra de medios de la entidad financiera. El algoritmo aplica 17 filtros para clasificar los canales de YouTube como seguros o inseguros para los anuncios de la marca.

Este sistema es la solución que JPMorgan Chase ha encontrado para volver a anunciarse en YouTube después de que docenas de anunciantes dejaran de hacerlo tras hacerse pública una investigación elaborada por ‘The Times’ en la que se revelaba que la publicidad de conocidas marcas de consumo podría haber estado financiando a grupos terroristas, supremacistas y otro tipo de organizaciones delictivas a través de la aparición involuntaria de sus anuncios –como consecuencia de la gestión automatizada de las inserciones- junto a contenidos publicados por estas organizaciones. Ejemplos de ello fueron un anuncio del Mercedes Clase A que apareció junto a un vídeo a favor de Daesh publicado en YouTube que tenía más de 115.000 visualizaciones o uno de la compañía hotelera Sandals Resort que se emitió junto a otro que promovía la causa del grupo yihadista Al-Shabaab.

Desde que se hicieron públicos esta investigación, YouTube también ha ido dando pasos para mejorar la seguridad de las marcas en su plataforma. Entre ellas destacan algunas como la colaboración con ComScore para realizar una verificación independiente que proporcionase a los anunciantes datos fiables y transparentes el contexto en el que aparecen sus campañas en YouTube, o el desarrollo de herramientas para garantizar que la publicidad de las marcas solo aparece en los contextos adecuados.