La marca Diadora, fundada en 1948, está en España desde hace más de 20 años. Inicialmente se dedicó a la producción de zapatos de montaña y de trabajo. La producción se desvió hacia los deportes en los años 60, cuando la marca adquirió algunas importantes patentes de EE.UU. En los años 70 nace un nuevo concepto de marketing deportivo que llevó a importantes campeones del deporte a convertirse en abanderados de la marca: Roberto Bettega, Pat Cash, Bjorn Borg o Boris Becker. La marca italiana fue una de las líderes de este cambio, y apostó por los aspectos tecnológicos de los productos para satisfacer las necesidades de los deportistas, por la comodidad y por un diseño contemporáneo y con estilo.Diadora se convirtió en la marca líder en el mercado de tenis y Borg era su símbolo. La empresa comenzó entonces a colaborar con campeones del fútbol y el atletismo. El deporte se convirtió en un fenómeno de masas y los productos de Diadora se llevaron también al sector del ocio. El efecto del patrocinio era impresionante: a mediados de los años 70 Diadora vendió más de tres millones de pares de zapatillas y la marca se podía encontrar en 3.500 puntos de venta en 45 países diferentes. Ganar testimonios del mundo deportivo llevó a Diadora a un aumento de su prestigio en todo el mundo y la marca se convirtió en sinónimo de éxito, de estilo italiano y de excelencia.En los años 80 la presencia de la empresa empezó a trasladarse también a otras esferas como el ciclismo, el baloncesto, el vóleibol, el automovilismo, la esgrima, el boxeo y las carreras de motos. Diadora cuenta hoy con grandes deportistas como prescriptores: Filippo Inzaghi y Francesco Tutti (que ganó la Copa del Mundo de fútbol en 2006), Marco Bortolami, símbolo del rugby italiano), y otros que van desde Guga y Nicolas Kiefer a Damiano Cunego y Alejandro Valverde.Hoy en día la producción de Diadora se concentra en deportes como el tenis, el fútbol, el running y el ciclismo, pero no ha renunciado a la extraordinario valor evocativo de la marca gracias a su línea Heritage y a la nueva gama alta, D.lux.Diadora se ha convertido en un ejemplo de cómo una firma europea puede sobrevivir al empuje de grandes firmas multinacionales como Nike o Adidas.