A principios de los setenta, Scottex quería encontrar un símbolo que combinase las características de suavidad y consistencia. La utilización de un cachorrito de labrador transmitía la imagen de consistencia y suavidad, a la vez que añadía a la marca una imagen entrañable, cercana y hogareña. De esta manera, en 1972 apareció en Reino Unido la primera campaña protagonizada por el perrito. En 1985, debutó en las televisiones de España. Desde ese año, se ha convertido en uno de los iconos más tiernos y reconocidos de las pantallas al haber protagonizado más de medio centenar de anuncios en la que constituye una de las campañas publicitarias más duraderas de la historia y seguramente ha contribuido a la popularidad de la raza de Scotty, un golden retriever.
Para Paula Otero, directora de marketing de Kimberly-Clark en España y responsable de la marca, “Scottex en general y el icono del perrito en particular gozan de una vitalidad de marca inusual en marcas con tanta trayectoria. Mientras otros iconos se han quedado por el camino, la imagen del cachorro está de plena actualidad y continúa generando interés y engagement con sus consumidores”.
En 2011 Scottex ha renovado toda la gama de productos con una fuerte inversión en su factoría de Salamanca proporcionando un papel “más suave que nunca” y por otro está animando a sus consumidores a contribuir a la preservación del medio ambiente. En los últimos meses ha lanzado el proyecto “Reto Ahorra Agua” apoyado por WWF y con el que quiere ahorrar 250 millones de litros de agua en España.
Pero la marca no sólo está innovando en sistemas de producción más eficaces y “verdes”, también lo hace en su forma de comunicarse con sus consumidores a través de herramientas como su web, el perfil de Facebook facebook.com/elperritodescottex, su canal privado en Youtube y su perfil de Twitter (@perritoScottex).
