La Web 2.0 seguirá en el punto de mira de todo el mundo en 2008. Se está produciendo gran revolución en la forma de crear y distribuir contenidos, pero la falta de debate y de análisis sobre este asunto hará que sigan propagándose diversos mitos.
En esta ocasión voy a exponer tres mitos o ideas que se repiten de forma implícita o explícita a través de muchos medios, y a dar mi opinión sobre ellos: El 'Mito Democrático' La Web 2.0 potencia la participación del público a gran escala, y por lo tanto es un paradigma de una nueva sociedad democrática, que da voz y representación directa a todos sus participantes. De alguna forma el 'poder' vuelve a la gente, etc. etc. La realidad: el público que realmente participa en una web es realmente escaso, se estima en un 1% del total de visitas el que deja input a través de comentarios, artículos, fotos, vídeos, etc. Sólo en América la cuestión de los blogs y de la opinión online se ha tomado en serio a la hora de valorar su posible influencia en el resultado de unas elecciones, y ni por asomo (afortunadamente) nadie se plantea ir más allá del voto electrónico a la hora de modificar el sistema democrático. Siempre planteo los mismos dilemas: · --¿Una noticia es más verídica porque ha recibido muchos votos? -- ¿Un vídeo, un documento, una información, etc. es más útil para la sociedad porque mucha gente lo ha descargado, leído o votado? Me las planteo porque casi todos los días aparecen declaraciones de gente que se supone inteligente admirando webs que son el equivalente electrónico de la telebasura, es decir, 'aquello lo miran muchas personas, ergo aquello es negocio, ergo aquello es bueno': el orden de los dos últimos factores depende de la persona en concreto. El Mito de los Nuevos Negocios Mediáticos Un nuevo modelo cambiará los medios de comunicación, y revolucionará el sector. Un sector de la sociedad producirá vídeos, artículos, etc el resto, la gran mayoría los 'consumirá. En medio surgirán nuevas empresas mediáticas, intermediarios, 'brokers de contenidos', etc. que desplazarán a los medios tradicionales, etc. etc. La realidad: algunos todavía tenemos fresco el recuerdo de la revolución del comercio electrónico. Internet se iba a convertir en el final para las tiendas tradicionales, grandes superficies, todo se vendería a distancia, etc. ¿Qué ha ocurrido? Fácil: los jugadores 'tradicionales' esperaron su momento, y hoy en día los supermercados por Internet más visitados llevan nombres como Mercadona, Carrefour, etc. Con la Web 2.0 creo que pasará algo parecido: dentro de poco tiempo parecerá que todo haya sido inventado por El País o El Mundo. Por el camino habrán quedado multitud de iniciativas más o menos 'frikis', que habrán servido como poco más que laboratorios para analizar lo que funciona y lo que no funciona. Tercer Mito: El triunfo de los pequeños 'Lo pequeño es hermoso', y con un espíritu similar parece que el nuevo Internet es el mejor sitio para dar a conocer nuevas iniciativas, startups, nuevos proyectos de internet. Un espacio en el que por fín parece que las pymes tienen la oportunidad de hacer oir su voz. La realidad: pocas correas de transmisión para grandes empresas cotizadas en bolsa se han inventado tan potentes como la Web 2.0. Cualquier novedad de Google, lanzamiento de Apple, cualquier tipo de Gadget, etc. encuentra en un ejército de bloggers una caja de resonancia que se cita y recita ad-infinitum.En ocasiones parece que todo el tinglado esté orquestado desde Wall Street. Es cierto que ocasionalmente un particular o una empresa hace un vídeo gracioso que alcanza una audiencia espectacular: flor de un día para el / la sujeto, y la excepción que confirma la regla. La llamada Web 2.0 es a día de hoy una gigantesca máquina de propaganda de las grandes empresas (especialmente las tecnológicas) y de sus nuevos productos.También a día de hoy, con tantos buscadores especializados, redes sociales, etc. etc. es imposible conocer por ejemplo las iniciativas startup que hay en España: nuevos proyectos, ideas y desarrollos que gente innovadora pone en marcha. Ninguno de ellos encontrará la más mínima audiencia si no es recogido publicado en algún blog o periódico con una audiencia destacada. O sea, un poco como siempre, la verdad...