No, si ya lo decían mis queridos excompañeros de El Laboratorio en la mítica película Listas de la no menos mítica Mercedes-Benz: “Los seres humanos adoran las listas”. Ya. Pero, ¿tanto?
Porque no sé si ustedes tienen la misma sensación que yo, pero ahora mismo coexisten dos fenómenos que inundan la pantalla de mi computadora:
1. Invitaciones a linkedin.
2. Listas. Igual dos de cada tres posts en blogs que tienen que ver con esto nuestro de la propaganda, el marketing y las disciplinas colaterales, son listas de lo más variopinto. Listas que crean supuestos gurús de esto y que se supone que, si las sigues a rajatabla, obtienes el éxito lo mismo en diseñar una estrategia de social media para una empresa fabricante de paraguas, que en crear el siguiente Nike+.
A mí, qué quieren que les diga, todo esto de las listas me suena a ese régimen que me dice que si no hago esto, esto y lo otro y hago esto, esto y lo de más allá, adelgazo de una vez por todas. El caso es que lo hago/no lo hago todo y me quedo como estoy. “Eso es que no lo habrás hecho bien”. Ya.
En serio, hay listas para todo. Cualquier cosita que quieran ustedes conseguir en sus campañas de marketing, se miran la lista que mejor se ajuste a sus necesidades, y resuelto el problema. No tienen ustedes ni que pensar. 10 Reglas Básicas Para Hacer Social Media Marketing Con Su Negocio (todo en mayúsculas, que impresiona más); Siete reglas de oro para que un blog funcione (me atrevo a sugerir a su autor como próximo post La Semana Fantástica de los Blogs); 7 consejos para el marketing viral. Infografía. (lista + infografía = lo máximo); 8 Tips For Optimizing Social Media Video To Help Your Brand "Get Found Online" (if you feel international today); O, por supuesto, mis favoritas: cualquier tipo de listas que mezclen el concepto reglas con creatividad. Me fascinan.
Claro, que la explicación ya estaba en el antedicho spot: “es el desesperado intento del hombre de poner orden en el caos”. Y es cierto. La comunicación está viviendo un momento de agitación en el que nadie sabe, a ciencia cierta, a qué atenerse. Qué es lo que funciona y qué es lo que no. Dónde hay que estar y dónde no. Lo único realmente cierto parece ser lo medible. Pero, claro, ¿tener 87.465 fans en Facebook es un éxito en sí mismo? ¿El follower es una unidad de medida? ¿Por cada cuántos megustas se venden dos pares de medias?
Bueno, pues los gurús escritores de listas parece que lo tienen clarísimo. Yo sería muy fan de que, después de cada lista nos mostraran ejemplos prácticos de cómo han utilizado, paso a paso, esos consejos y solo esos consejos para crear campañones exitosos. Y también de que cada briefing lo respondan con el método lista. Los no-brainstormings deben ser realmente apasionantes.
Debe ser que se les olvida añadir el documento adjunto o algo pero, generalmente, estas clases magistrales se hacen desde la barrera, sin un mal case study que llevarse a la boca.
El nuevo ‘spam’
Por supuesto, no hay que generalizar. Existen listas cuyo contenido es muy interesante. Pero reconozco que, en cuanto veo el formato lista se me activa el bullshit detector y le presto una atención muy relativa a lo que estoy leyendo.
Las listas se han convertido en el nuevo spam. Si me permiten un consejo (que es una lista de un solo elemento, admito mi contradicción): ni busquen, ni comparen.
BONUS TRACK: una de las cosas maravillosas que tiene el escribir en esta grata publicación es descubrir joyas de la comunicación mientras investigas googlísticamente el tema a tratar. En este caso, pongo en su conocimiento que he descubierto la URL con el naming más grato de la historia: www.digitaltonto.com. Me he sentido como si me mirara en un espejo.