La agencia Delamata Design ha trabajado, siempre de la mano de Coca-Cola, en conseguir el nuevo diseño de esta bebida centrándose en los cuatro elementos que forman parte del ADN de Aquarius -color, la letra A, las gotas y la diagonalidad-. La nueva imagen mantiene los azules turquesa y oscuro como elementos de diferenciación y punto fuerte de la personalidad corporativa.


Este nuevo trabajo destaca también por el efecto volumétrico del naming y el refuerzo de la iconicidad de la letra A, a mayor tamaño que el resto, en diferente color y con efecto degradé, con objeto de lograr mayor dinamismo y haciéndola protagonista de la lata. El tratamiento de las gotas refuerza además el concepto de refresco.


En cuanto a los elementos diferenciadores de la gama, mientras la versión regular mantiene en todo momento los aros olímpicos como parte de sus orígenes y razón de ser, en la versión Aquarius libre se potencia vía códigos de color, su distinción frente a la otra variedad, y se remarca su atributo de “Sin azúcares”.