
Este crecimiento ha hecho a muchas marcas del fabricante a lanzar mensajes comparativos desde sus campañas publicitarias en las que incitan al consumidor a elegirlas por diversas razones, destacando casi siempre valores como la calidad. Central Lechera Asturiana y Calvo son algunas de las marcas con campañas recientes en las que buscan posicionarse como la primera opción para los consumidores.
A este respecto, la Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC) ha difundido un comunicado en el que considera que estas prácticas son “publicidad comparativa desleal, que denigra de modo indiscriminado a un importante segmento de la oferta, y que induce a confusión a los consumidores”. Este organismo dice haber observado la persistencia de determinados mensajes que intentan poner en valor las marcas anunciadas a base de criticar, de un modo global y absoluto, a los productos denominados “de marca blanca”, que son comercializados por las cadenas de distribución con denominaciones propias.
La AUC considera que no puede recurrirse legalmente a este tipo de menciones comparativas, según las cuales todos los productos de marca blanca, y sólo los productos de marca blanca, son inferiores en calidad y prestaciones a los anunciados, llegando incluso a ser perjudiciales.
La Asociación considera que este tipo de publicidad podría inducir al usuario a pensar que, a la hora de adquirir un determinado producto, deben quedar excluidas las marcas blancas entre sus posibilidades de elección por un principio de precaución, menoscabando así el crédito de estos productos en el mercado de forma indiscriminada, y sin que quepa alegar en este caso, debido a la generalización abusiva a la que se recurre el supuesto de exceptio veritatis recogido por la legislación para permitir la mención desfavorable de los competidores.