El spot de la campaña de Pavofrío, titulado también “Deliciosa calma”, se desarrolla precisamente en el restaurante en el que ha tenido lugar la convocatoria abierta al público, un local madrileño (La Contraseña), reconvertido para recibir solo a mujeres y servir un menú específico a base de platos de pavo, con unos nombres tan sugerentes como “No he ido al gimnasio porque no me ha dado la gana y ya iré si puedo con pavo y aceite de macadamia (es decir, Ensalada de gamba blanca y pavo con aceite de macadamia)”, en línea con el mensaje que se ve en el spot.
Como parte de la estrategia de la campaña, durante cuatro noches el restaurante se ha cerrado para Campofrío y los más de 150 comensales que han podido acceder a esta promociónm que ha contado con la actriz, presentadora y humorista Llum Barrera como anfitriona, y Susi Díaz en la cocina.


Conceptualmente, “Deliciosa calma” tiene en su origen un estudio sobre mujeres estresadas, realizado por Nielsen, cuyos datos se dieron a conocer en el programa conducido por Jordi Évole en La Sexta, y en un estudio de la Universidad de Berkeley que habla de alimentos que quitan el estrés, siendo el pavo uno de ellos. No obstante, la campaña no habla exactamente de alimentos que reducen el estrés, algo que no contempla la autorregulación publicitaria española en materia de alimentación, pero sí constituye la base teórica del concepto finalmente elegido: una sociedad equilibrada también elimina el estrés.