Los altavoces colocados en la citada estación de metro fueron el ingrediente fundamental de la broma gastada a los viajeros del suburbano madrileño. En ellos se emitió el característico sonido que emiten los trenes cuando llegan, permanecen y se marchan de la estación. Para sorpresa de los allí presentes, y sobre todo para la de aquellos que aceleraron su marcha al escuchar el ruido del convoy mientras bajaban a las escaleras que dan al andén, no había ningún tren en las vías.


La secuencia completa de la acción ha quedado recogida gracias al trabajo de varias cámaras ocultas que registraron las reacciones de los usuarios antes de conocer que, en realidad, no se trataba de ningún tren fantasma y que todo había sido una campaña promocional para animar el estreno de “Cazafantasmas”, que en España tendrá lugar el 12 de agosto.