¿A quién no le intentaron vender por teléfono un fabuloso paquete vacacional demasiado bonito para ser verdad? Las ofertas de dudosa ética ya tuvieron su protagonismo en el mundo off line; y ahora como todo sucede en la red, le ha tocado al universo online. Muy a nuestro pesar, algunas compañías ponen en práctica acciones de publicidad con ofertas muy atractivas, pero de dudosa ética y con mucha letra pequeña. Y así es, en el mundo interactivo existen ciertos negocios que llevan a cabo acciones que generan beneficios mediante el perjuicio de los internautas-consumidores. ¿A alguien le suenan las promociones de suscripción SMS Premium?

En un negocio existen dos partes, la oferta y la demanda, que se ponen de acuerdo para realizar un intercambio y sacar, a través de éste, un beneficio mutuo. También existen algunos negocios, en concreto algunos online, en qué el ofertante no es del todo claro y aunque sin omitir información pero mostrándola adrede con letra diminuta, no dejan claro en qué consiste el intercambio… Ahí es dónde el internauta, el demandante, sale perjudicado.

Estas acciones, aunque a priori rentables para sus impulsores, tienen una fecha de caducidad. Cuando un negocio no está basado en la ética profesional deja de ser rentable a medio y, por descontado, a largo plazo. ¿Acaso los usuarios seguirán cayendo en las garras de este tipo de publicidad?

Evidentemente no. Los clientes se extinguirán ya que no querrán acceder a ningún tipo de estas propuestas, y por lo tanto habrá que cambiar el negocio, la oferta e incluso la marca.

Cabe señalar que al margen de estas compañías, existimos otras muchas que trabajamos lícitamente en el ámbito online, concretamente en publicidad y marketing, y que nos dedicamos a hacer de la publicidad nuestro negocio. La inevitable vinculación con este tipo de prácticas es también perjudicial para nosotros. El irremediable rechazo de los consumidores nos salpica de cerca y el sector se desprestigia.

Un claro ejemplo de estas prácticas son los servicios sms Premium. A través de estos, las empresas ingenian mil y una formas distintas para conseguir el número móvil del usuario y su operador, con el objetivo de enviar gran cantidad de mensajes publicitarios al día, que los receptores acaban pagando mediante su factura de teléfono. Atención: ¡el coste de estos mensajes es de 1,42 -sin incluir el IVA- con un máximo envío de 25 mensajes al mes, lo qué puede suponer hasta un total de 35,50! al mes más IVA ¡¡¡cada día!!!

Algunas de las excusas para conseguir el teléfono de los internautas son sondeos de opinión sobre temas de actualidad relacionados por ejemplo con la catástrofes nucleares, la ley antitabaco, etc.; preguntas que tienen que ver con la imagen y la estética, temas que hoy día preocupan a gran parte de la sociedad occidental, como saber cuál es tu peso ideal; o preguntas relacionadas con temas que a muchos despiertan curiosidad como medir tu personalidad por medio de la caligrafía.

Cada vez son más los usuarios en foros que crean nuevas conversaciones para hacer frente a esta “invasión Premium”, catalogando a esto tipo de acciones de estafas y timos. Hasta los medios de comunicación se han hecho y se hacen eco de este tipo de prácticas, así como del rechazo de los usuarios que se han visto atrapados por estas campañas… Pero a pesar de todo, estas compañías siguen y siguen intentando recaptar usuarios.

Con la finalidad de poner fin a todo este desaguisado, es decir, proteger al usuario y defender a todas aquellas empresas profesionales del sector, se ha creado Stop SMS Premium (http://www.stopsmspremium.es), la primera comunidad online que da voz a todas aquellas personas -físicas y jurídicas que rechazan este tipo de servicios. El objetivo, en última instancia, es que la legislación actual adquiera una consciencia social de esta realidad, que pueda poner fin a este tipo de acciones, así como informar de casos reales y actuales para que todos estemos adecuadamente informados y estemos alerta a la hora de contratar este tipo de servicios.

Xavier Carreras es director de Coregistros de Grupo Cyberclick