Novanca tiene como objetivo explotar el negocio bancario en el sur de Madrid, donde no hay presencia física relevante de ninguna caja rural y se ha marcado como objetivo abrir una oficina al mes durante los próximos tres años, momento en el que se espera alcanzar beneficios y a partir del cual se prevé continuar el proceso de expansión a un ritmo importante. Por otro lado, Novanca se dirige a todo tipo de clientes, pero con una fuerte orientación hacia las economías domésticas, ofreciendo para ello una gama de productos sencilla y centrada en los productos de ahorro más demandados. En las sucursales de Novanca los clientes podrán contratar tanto los productos financieros habituales, como cuentas corrientes o préstamos hipotecarios, como teléfonos móviles o viajes. La nueva entidad abrirá a primera hora de la mañana, como los bancos, pero cerrará sus centros al público a última hora como cualquier tienda. CIAC ha diseñado la imagen exterior e interior de Novanca partiendo de la idea de que la nueva entidad ofrece productos bancarios pero funciona como una tienda.