Tras año y medio de trabajo en el reposicionamiento de la marca, Anís del Mono ha presentado su nueva imagen, estrategia de comunicación e identidad visual a través de la campaña ‘Dale Vidilla’, que estará en campaña gráfica y audiovisual online, con cinco spots diferentes en 15, 20 y 45 segundos.

Esta propuesta publicitaria quiere reflejar la personalidad de una marca espontánea y alegre, porque, según explican, es precisamente la alegría la emoción que más identifica a Anís del Mono: una marca alegre nacida desde la genialidad y el humor, una marca icónica, que representa y aporta alegría en las reuniones y las fiestas.

“Con tanto mensaje aleccionador de marcas que nos recuerdan todo lo que deberíamos mejorar en nuestras vidas queríamos ofrecer una visión menos solemne, menos seria de nuestra forma de disfrutar. Vidilla es una expresión muy nuestra que sin damos cuenta usamos en repetidas y diversas ocasiones de nuestro día a día. Es esa alegría que ponemos en gestos pequeños y que expresa de una forma muy cotidiana la más simple de las emociones. Esa vidilla es la que encontramos cuando echamos un chorrito de Anís del Mono al café o a las rosquillas, o de la misma manera cuando alguien coge una cucharilla y hace sonar la botella de Anís del Mono, le da vidilla a la sobremesa”, explica Natalia Gómez, 'global marketing director spirits & wines'.

Las piezas, producidas por Fish, se centran en Anís del Mono Dulce, la marca líder de su categoría, dentro de un portfolio que incluye también Anís del Mono Seco, Crema de Anís, una crema ligera y sedosa y el Carajillo de Anís del Mono, un licor de café dulce y aromático.

La imagen rejuvenecida de Anís del Mono

En paralelo a la definición de marca que ha partido de la agencia Entretanto, se ha implementado un proceso integral de rebranding dando como resultado una imagen rejuvenecida que rescata toda su esencia icónica.

Por una parte, se ha rediseñado el logotipo y desarrollado una identidad visual fiel a su historia y su esencia. El cartel metálico exterior de la fábrica de Anís del Mono en Badalona, declarado patrimonio cultural, ha servido de piedra angular del desarrollo de una tipografía propia, fruto de la colaboración con el diseñador y tipógrafo Ales Santos.

Se han completado los caracteres, puntuación y demás elementos faltantes con documentación de las imprentas de la época, para transformarla en tipografía utilizable, con presencia no solo  en el logo sino también en los distintos puntos de contacto de la marca con su consumidor y elementos corporativos, destilería, señalética, cajas, merchandising, y demás desarrollos de su arquitectura de marca.

“Hemos querido ser muy respetuosos con el significado que Anís del Mono tiene para la gente. Es una marca icónica, querida y con muchos matices y que pertenece a la cultura popular. Nuestra labor desde un punto de vista estratégico ha sido concretar su mensaje de siempre y traerlo con fuerza al mundo de hoy para recuperar esa cercanía y relevancia en la vida de los consumidores”, señala Cristina Abril, directora de Entretanto.

Y como 150 años de historia de marca dan para mucho y Entretanto ha trabajado junto al ilustrador Alex Ferreiro en la recuperación artesanal de ilustraciones antiguas, el famoso ‘Mono con cara de Darwin’ y otros activos de marca para crear nuevos elementos gráficos que expanden su lenguaje visual. Se trata de una recuperación y modernización de los elementos pioneros de comunicación y marketing ideados por los hermanos Bosch, creadores del producto en 1870 y verdaderos visionarios que escogieron la figura del Mono, inspirador del nombre y del espíritu del anís líder y pionero en España.