Cuántas cosas buenas ha traído Internet a las vidas de los usuarios, pero también qué situaciones desagradables se han generado en este entorno. Tanto es así que algunos consideran la Red como un patio de colegio en el que se lanzan ofensivos y crueles mensajes que llegan a dañar la autoestima del que está al otro lado de la pantalla, provocando depresión, trastornos alimentarios o dolencias psicológicas.

Para perder de vista este negativo efecto que pueden llegar a tener las redes sociales e intentar reducir ese sabor amargo que dejan algunos comentarios, el Chef Karim Bourgi y MullenLowe MENA con base en Dubái han encontrado en el chocolate la mejor forma de crear conciencia sobre los efectos de la vergüenza corporal, los mensajes de odio y el ciberacaso.

A través de chocolatinas elaboradas y con diseños de lo más originales y creativos han lanzado la campaña ‘Chocapologies’ o, lo que es lo mismo, disculpas recubiertas de azúcar que permitan construir un Internet mucho más seguro y agradable.

Y para asegurarse de que el lanzamiento es todo un éxito, el  conocido pastelero y chocolatero formado en la prestigiosa escuela Le Cordon Bleu de París y MullenLowe han hecho un envío de estas chocolatinas a celebrities, influencers, gamers y personas que han sido víctimas de trolling para que las compartan en sus perfiles.

Hasta la fecha la campaña, que está creciendo y extendiéndose como la espuma por redes sociales, acumula más de 261 millones de personas ¡y subiendo! Sin duda, 'Chocapologies' ya está haciendo que Internet sea más dulce.

Pero hay más. 'Chocapologies' también anima a las personas a compartir si creen que Internet les debe una disculpa enviando mensajes directos y compartiendo cómo han sido trolleados en la cuenta de Instagram @chocapologies para tener la oportunidad de recibir una barra gigante de Chocapologies - en nombre de Internet.

El motivo por el que se ha utilizado el chocolate como ingrediente estrella de esta campaña tiene mucho que ver con los beneficios que este producto posee: aumenta la producción de endorfinas y hace que aquel que lo consume experimente un sentimiento de felicidad y euforia, ayudando a reducir el dolor y el estrés.