
El precio se ha convertido en un factor de compra clave: un 65% se fija mucho más ahora en los precios que antes. Un dato alarmante para las marcas es que un 50% de los españoles dice comprar hoy más marca blanca que antes, el doble que la media europea.
La búsqueda del mejor precio lleva a una mayor promiscuidad con las marcas y a una lealtad con condiciones: dos tercios de los consumidores están dispuestos a cambiar de marca para sacarle mayor partido a su presupuesto. El mismo porcentaje declara estar dispuesto a ser fiel a su marca sólo si el precio es ajustado. Además, hay lugar para los caprichos: el 59% siente la necesidad de darse algún capricho al margen de su situación económica y el 55% sigue estando muy interesado en comprar novedades.
Sin duda, nos encontramos ante un consumidor “con control”, que invierte más tiempo antes de comprar: dos de cada cinco españoles reconocen que tienden a comparar precios en páginas web, igual que la media europea.
De hecho, la compra on line que ofrece precios más económicos empieza a ser una opción interesante. Dos de cada diez españoles reconocen hacer la compra on line más que antes.
El estudio refleja que si bien el consumidor alarga el proceso de decisión de compra a la búsqueda de la mejor opción, por otra parte reduce considerablemente su círculo de “influenciadores”. Es decir, antes tenía mucho más en cuenta las tendencias de mercado en diferentes sectores, se guiaba más por la publicidad, el efecto “trendy” de las marcas en la sociedad, etc., en cambio, en estos tiempos que corren parece que hemos reducido el círculo de personas en las que confiamos como prescriptoras y recurrimos en un 42% a la recomendación de amigos más cercanos y a la familia, versus el 39% de media europea.
Otras conclusiones:
-Compartir es vivir
Dicho esto, no nos sorprende ver que 1 de cada 3 españoles comparten cosas, ahora más que antes, con familia y amigos. De hecho, aunque por detrás de otros países europeos, vemos una tendencia creciente hacia el compartir, alquilar, tomar prestado y hacerse uno mismo tarjetas, regalos, bricolaje en casa, etc. Por ejemplo, un 22% reconoce coger libros prestados en la biblioteca más que antes, otro 22% hace arreglos en casa más de lo que lo hacía antes.
-Quedarse en casa es la nueva forma de salir
El consumidor ha vuelto a celebrar fiestas en casa, a la comida casera y al "tupper"; Un 36% de consumidores cocinan ahora más en casa, el 43% nos cuenta que se llevan la comida al trabajo frente al 36 % de media europea.
-Vuelta a los valores tradicionales
Se ve reflejada también en las estrategias de comunicación, donde hemos visto “renacer” marcas y productos que formaban parte de nuestros recuerdos infantiles. Marcas que siguen esta tendencia dentro del sector higiene personal son, por ejemplo, Moussel, La Toja, la fragancia de jabón de Marsella utilizada por varias marcas, todas ellas basando su estrategia y packaging utilizando valores y estéticas del pasado.
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