En la actualidad, el mundo del consumo ha experimentado una metamorfosis significativa. La tecnología, la conectividad y la búsqueda de ofertas han dado forma a nuevos hábitos de compra entre los consumidores. La era digital ha impulsado dos tendencias particularmente destacadas: la caza de descuentos y el auge de marketplaces.

Toda esta revolución, que ha estado en marcha durante algún tiempo, ha afectado a nuestra forma de comprar y, sobre todo, a marcar tendencias que influyen en la economía y en la vida de las personas.

Sea lo que sea, al mejor precio

La búsqueda de descuentos es una característica clave de los hábitos de consumo actuales. La comodidad de buscar en línea nos permite comprar precios en cuestión de segundos.

Además, los eventos de descuento, como el Black Friday, se han vuelto icónicos y con personas esperando a las 00.00 frente a sus dispositivos para obtener las mejores ofertas. Esto me plantea una pregunta: ¿estamos dispuestos a comprometer la calidad por un precio más bajo?

Esto, me imagino, varía de un consumidor a otro y de un producto a otro. Pero es innegable, que la búsqueda de gangas ha influido en la percepción de valor.  Las empresas buscan lanzar ofertas atractivas, desarrollando entre los consumidores una mentalidad de compra inteligente.

Busques lo que busques, busca en un marketplace

La tecnología y la facilidad de conexión global han permitido el crecimiento de los marketplaces. Estas plataformas ofrecen una amplia variedad de productos y servicios de distintos vendedores. En solo un clic, podremos encontrar un mundo de opciones, desde ropa, hasta lavadoras, pasando por herramientas y juegos de mesa.

¿El lado bonito de esto? Su capacidad para mostrar múltiples opciones en un solo lugar. Lo que esto nos lleva a pensar en la cantidad de decisiones impulsivas que podemos tomar debido a la gran cantidad de opciones que se nos presentan. La mayoría de las compras online de este año se han llevado a cabo dentro de marketplaces.

Elijas lo que elijas, no estarás satisfecho

Esto está relacionado con lo que mencionaba anteriormente de la gran cantidad de opciones que se nos presentan. La cantidad de productos que se nos presentan puede ser agotadora, lo que puede hacernos sentir insatisfechos con nuestras compras. La paradoja de elegir sugiere que, a pesar de tener tantas opciones, podemos no estar contentos con la decisión que hayamos tomado.

¿Quién te vende qué?

En este sector, especialmente cuando hablamos de marketplaces, los consumidores hemos cambiado nuestras tiendas locales por vendedores que se encuentran, quizá, no siempre, en la otra punta del mundo. Lo que nos lleva a una limitación de la interacción entre vendedor y consumidor.

Sin embargo, sí que me gustaría destacar que cada vez las empresas confían en contenido generado por el usuario y en la humanización de las marcas, con la principal finalidad de generar confianza y crear vínculos reales con sus clientes.

Por último, existen muchos usuarios que confían en los valores de las marcas en las que compran con tal de llevar a cabo un consumo más responsable y sentirse identificados con aquello que promueven, comparten y simbolizan.