En la era digital actual, el contenido es el protagonista. Aunque probablemente esto ya suene a cliché, esta frase nunca ha sido más cierta, especialmente en el competitivo mercado online donde las empresas luchan por la atención de los consumidores.
A todo esto le sumamos el hecho de que la forma de comunicar ha cambiado, que el consumidor ha cambiado, dando paso a un nuevo consumidor que busca contenido atractivo, dinámico y personalizado. Lo que hoy es tendencia, mañana ya está pasado de moda. Por lo que hay que estar constantemente generando contenido.
Esto ha dado lugar a la aparición de las 'fábricas de contenido' (content factories), un fenómeno que está redefiniendo la manera en que las empresas se comunican con su audiencia. Las fábricas de contenido, como Mambo Community, en esencia, son equipos o entidades dedicadas a la producción de contenido digital. En el caso de Mambo, producción de vídeo corto.
Recientemente hemos podido observar cómo progresivamente ha ido cambiando la manera de comunicarnos. Vemos, por ejemplo, que plataformas como Instagram, donde hasta el momento reinaba la imagen estática, actualmente han ido imitando el éxito de TikTok, para pasar al vídeo corto. Actualmente el reel es el formato que te da mayor visibilidad y posicionamiento en Instagram. Sin duda, un nuevo lenguaje en auge, diseñado para captar la atención del público, mejorar el posicionamiento SEO y en definitiva, impulsar las ventas.
Las empresas ahora necesitan generar contenido no solo atractivo sino también constante y diversificado, adaptado a las tendencias actuales, si quieren ser relevantes. Las fábricas de contenido permiten a las empresas mantener este flujo constante, adaptándose rápidamente a las tendencias del mercado y a las preferencias cambiantes de los consumidores. Además, la necesidad de personalización ha escalado: los consumidores esperan que el contenido no solo les hable, sino que resuene personalmente con ellos. Las empresas tienen que conocer el lenguaje del consumidor y hablar su mismo idioma.
Ya no basta solo con producir en masa; sino que hay que tener en cuenta que la calidad y la relevancia del contenido son más cruciales que nunca. Aunque cuando hablamos de calidad, no tenéis que pensar en estas grandes producciones que se hacían hasta el momento, ya que con un smartphone y un ring light puedes tener vídeos de calidad, adaptados a la plataforma. Reduciendo de esta manera el precio de las producciones.
Las empresas deben equilibrar la velocidad y volumen de producción con la necesidad de mantener el contenido auténtico y valioso para su audiencia. Aquí es donde entra en juego la creatividad y la innovación, aspectos que las fábricas de contenido deben fomentar dentro de sus equipos para no caer en la trampa de producir contenido genérico que no logre impactar.
La incorporación de creadores de contenido en la estrategia, también juega un papel fundamental, ya que se utilizan personas (influyentes en la plataforma o no), pero con un valor agregado: son expertos en la vertical, conocen la plataforma y crean contenido de calidad.
Veamos un caso práctico: supongamos que representamos a una empresa dedicada al sector cinematográfico y buscamos una estrategia efectiva para promover sus servicios en la plataforma. Una estrategia muy efectiva sería colaborar con creadores de contenido especializados en el ámbito del cine. Esto nos permitiría crear contenido auténtico, convincente y de gran cercanía con la audiencia. ¿Quien conoce mejor la plataforma que los propios usuarios?
El futuro de las fábricas de contenido parece prometedor pero desafiante. La inteligencia artificial y la automatización prometen revolucionar aún más la producción de contenido.
En conclusión, las fábricas de contenido representan una respuesta lógica a la creciente demanda de contenido digital por parte de las empresas. Su capacidad para producir contenido a gran escala, manteniendo la relevancia y calidad, y sobre todo conociendo a la perfección el lenguaje del usuario, las convierte en una pieza clave en la estrategia de marketing digital de cualquier empresa.