“Las mayores esperanzas las tenemos puestas en el sabor capuccino porque no hay nada parecido en España”, asegura Anaya. Este responsable describe al producto como “un refrescante sabor conjugado con una pronunciada cremosidad y con un bajo contenido en materia grasa ( menos 1,5%)”. Con este lanzamiento, la compañía, que hasta ahora estaba centrada en el mercado de los quesos, quiere hacer la competencia a las bebidas sin gas.

El diseño de la botella ha sido una de las apuestas de Arla Foods. Con un estilo rompedor que nada tiene que ver con los refrescos, este envase está destinado a seducir “por impulso” a un público adulto, target al que va destinado el producto.

Por otra parte, Arla Foods ha estrenado su primera campaña publicitaria en televisión en España. Con una inversión de 2,5 millones de euros, los tres spots que anuncian el queso rallado Finello serán emitidos en TVE-1, Antena 3, Telecinco y Cuatro.

Según Anaya, los quesos de importación están haciendo crecer el estancado mercado de los quesos en España, dominado por el queso manchego. Los datos de Nielsen aseguran que el mercado español crece a un ritmo de un 6% anual. En cuanto al consumo por habitante, España se encuentra a la cola de Europa, con solo 10 kilos, lejos de los 26 de Francia y los 28 de Grecia.