El concepto creativo del spot está basado en la libertad de expresión llevada al terreno de lo surrealista. Se trata de un spot con el característico toque de humor de esta agencia creativa ya que el protagonista es un pollo de carne y hueso que habla, pero también por lo peculiar de la situación donde destaca el rasgo de autenticidad y rebeldía de este pollo que admite querer ser una patata frita y por ello entra en conflicto con otro pollo. Sus protagonistas son Pebbles y Farmal, dos pollos de 2 años de edad, procedentes de una granja de White Plains (Nueva York, USA), ambos han tenido que pasar por un duro casting para hacerse con estos papeles. Como dato curioso destacar que a lo largo de todo el rodaje realizado en Nueva York se precisó de un adiestrador de pollos que instruyó a Pebbles y a Farmal en el arte de la interpretación. La campaña de publicidad convencional se centra en spots de televisión y cuñas de radio. Por otro lado, habrá una campaña especial en punto de venta y presencia interactiva en el portal Habbo hotel. El anunciante ya había realizado otras acciones para este producto (ver noticia relacionada) En 2005, Burger King invirtió en publicidad 10,6 millones de euros, según Infoadex.