Desde 1996 Unilever y Pescanova andan en litigio por culpa del capitán Pescanova. Según la multinacional, el Capitán Pescanova es un plagio tanto del Capitán Iglo como del Capitán Frudesa, figuras anteriores a la creación por parte de la agencia Young Rubicam del polémico prescriptor de Pescanova. Según los demandantes, “la imitación de personajes y textos de las leyendas narradas en los respectivos spots, constituye un acto de competencia desleal". Según ha hecho público Autocontrol, el pasado mes de diciembre el Tribunal Supremo desestimó el recurso de casación interpuesto por Unilever Foods España y la agencia creativa Ammirati Puris Lintas contra la sentencia dictada en 2005 por la Audiencia Provincial de Madrid, declarando firme dicha resolución, en la que se desestimaba el recurso de apelación interpuesto por ambas compañías contra la sentencia de Primera Instancia, confirmando, por tanto, la resolución desestimatoria de la demanda. Para la Audiencia Provincial de Madrid, el término "Capitán" define con carácter general una profesión (capitán de barco) y no puede en sí mismo ser patrimonializado por quien lo haya usado anteriormente. Además, considera que los contenidos de los spots publicitarios de Pescanova no imitan a los de Frudesa.