El reposicionamiento de marca de Leroy Merlin tiene como objetivo reforzar la comunicación emocional, poniendo el foco en las familias como protagonistas de las campañas. “Familias diversas que viven situaciones reales con las que cualquier consumidor puede verse reflejado”, destaca María Herranz, mananing director y head of advertising, brand y content de Ogilvy Madrid, agencia encargada de esta evolución.

Así en ‘Un hogar no nace. Un hogar se hace’, su campaña de verano (la de primavera contaba la historia de una pareja que decide adaptar su hogar para que la madre de ella se fuera a vivir con ellos), se muestra a una familia monoparental que deja el bullicio de la ciudad para instalar su nuevo hogar en el campo.  

“Esta plataforma va perfectamente alineada con nuestro propósito de marca ‘Cambiar nuestro mundo está en nuestras manos’, con el que queremos dar protagonismo a los diferentes tipos de personas y sus necesidades reales ya que son ellos los que consiguen transformar una simple casa en un hogar”, explica Elvira Pacheco, responsable marca y publicidad de Leroy Merlin.

Como comenta Chus Rasines, director creativo ejecutivo de Ogilvy Madrid, sobre el proceso creativo de la misma: “con la pandemia y el teletrabajo, muchas personas se han planteado dejar la ciudad para mudarse a pueblos que permitan vivir en casas más grandes y ganar en calidad de vida. La historia que hemos contado en este spot es una historia real, la de una de esas familias que se replantea su vida y busca transformar su hogar, hacerlo propio. Porque ‘Un hogar no nace. Un hogar se hace’. Una pieza que no solo habla del hogar físico, sino del hogar emocional”.

La campaña cuenta con un plan de medios gestionado por OMD, con presencia en televisión, radio, prensa, punto de venta, medios digitales y redes sociales.