
¿Qué dificultades ha encontrado en su carrera profesional por el hecho de ser mujer y cómo las ha superado?
Al principio de mi carrera, intenté muchas veces encajar en el molde de lo que se "espera" de una mujer, especialmente evitando desacuerdos. Durante mucho tiempo prioricé la conciliación sobre expresar mi opinión real. Hasta que un día, en medio de una reunión, mi manager me preguntó qué pensaba sobre un tema en discusión. Decidí expresar mi desacuerdo y, en ese momento, sentí una gran liberación. No se trataba de tener la verdad absoluta, sino de reconocer que mi voz también era válida. Desde entonces, me aseguro de expresar mis ideas y animo a otras mujeres a hacer lo mismo en cualquier espacio profesional o personal.
¿Cómo ha evolucionado el rol de la mujer en la publicidad española?
Desde una perspectiva positiva, creo que hoy somos más visibles y reales, tanto como imagen de las campañas como siendo creadoras de ellas. Cuando empecé en el sector, los directores creativos y quienes lideraban las reuniones eran mayoritariamente hombres, y las mujeres apenas participaban. Ahora, en muchas agencias con las que trabajo, las voces están más equilibradas e incluso en algunos casos son las mujeres quienes lideran la conversación. Esto no debería ser solo por inclusión, sino porque representamos el 52% de la población mundial y somos un motor económico clave. La publicidad debe hablarnos de forma relevante y auténtica.
¿Qué referentes femeninos ha tenido en su carrera profesional?
Muchísimos, en distintos ámbitos. Cuando estudiaba Economía en Colombia, me inspiró Margarita Guzmán, fundadora del Banco Mundial de la Mujer, quien rompía moldes para facilitar el acceso de las mujeres al sector financiero en los años 80, algo revolucionario en su momento.
Luego, al cambiar de carrera hacia el marketing, conocí a Wendy Jones en mi primer trabajo en eBay. Su liderazgo, basado en la transparencia y la comprensión del negocio, me hizo ver que el marketing es una herramienta clave para el crecimiento empresarial. Desde entonces, defiendo su valor estratégico y busco que los KPIs de mi equipo estén alineados con los objetivos del negocio.
También sigo la trayectoria de Whitney Wolfe Herd, fundadora de Bumble, quien, tras su salida de Tinder, demostró que su visión seguía siendo válida y revolucionaria. Su forma de abordar el marketing y la creación de nuevas categorías es realmente inspiradora.
A nivel local, admiro a Mónica Moro. La conocí cuando lanzaba mi primera campaña de TV en España, y pese a mi síndrome del impostor, me hizo sentir parte del equipo. Su apoyo fue clave para ganar confianza y verla ahora con su propia agencia independiente sigue siendo una gran inspiración.
¿Qué políticas de igualdad y conciliación sigue su empresa? ¿Qué objetivos tienen todavía en el horizonte? ¿Se han visto afectadas por la cancelación de este tipo de políticas en Estados Unidos?
En Globant, nuestra meta es alcanzar un 50/50 en representación femenina en puestos directivos y garantizar una representación equitativa en los procesos de selección. Contamos con un modelo flexible que permite a nuestro talento organizar sus horarios y balancear su vida personal y profesional. Además, tenemos un programa innovador que permite a las madres viajar con sus hijos durante los primeros dos años en sus viajes de negocio. Nuestras políticas son globales y se aplican en todos los territorios donde operamos.
¿Cómo se ha adaptado la publicidad de su marca a valores como la diversidad y la igualdad?
Quiero pensar que las marcas son cada vez más conscientes de los mensajes que transmiten. Algunas han entendido que deben ser válidos, relevantes y auténticos para una amplia variedad de personas, lo que hace el proceso creativo más interesante y evita caer en clichés. Lo que más me incomoda es cuando las marcas abordan la diversidad como una "lista de la compra", marcando casillas sin un compromiso real. No soporto a aquellas que se visten de morado en marzo pero carecen de un compromiso genuino el resto del año. Si no es auténtico, es mejor no forzarlo.
Por último, recomiéndenos un libro, una serie o una película que sea una inspiración para las mujeres.
Libro: "Cosas de mujeres: Una historia en 100 objetos", de Annabelle Hirsch, y "El camino del artista", de Julia Cameron.
Serie: "Fleabag "/ "The Good Wife".
Película: "Erin Brockovich, una mujer audaz" (2000) o "Hidden Figures" (2016).