La campaña tiene desarrollo en internet con un microsite (www.nosoloabrimosnueces.com) que se está promocionando con un viral en el que Fernando Alonso, del que ING Direct España es principal patrocinador personal, muestra su habilidad para romper nueces con el cuello. La web incluye un juego en el que el usuario puede probar a romper nueces y una aplicación que le permite encontrar su oficina de ING más cercana. También puede participar en el sorteo de una de las quince nueces firmadas por Alonso que el banco sortea. Por cada reenvío del vídeo a un amigo, el usuario obtendrá una participación en el sorteo. Los ganadores se conocerán el 11 de noviembre. De esta parte de la campaña se ha encargado Ogilvy. En los primeros cuatro días, el vídeo de Fernando Alonso rompiendo nueces con el cuello ya había logrado más de 218.000 visitas, según datos proporcionados por ING. A partir de ahí surge un gag que ya era viral en sí mismo con algo que ya estaba en la calle: el fuerte cuello de Fernando Alonso (propio de los corredores de F1). De ahí sale un viral que se cierra con www.nosoloabrimosnueces.com. El lanzamiento del vídeo en la red ha sido una estrategia combinada de varios medios: portales de vídeos (Youtube, Vimeo…); blogs, redes sociales y agregadores de noticias (Menéame, Fresqui….); y medios convencionales (TV, radio, prensa escrita y on line)El banco también está comunicando en televisión esta nueva presencia en oficinas. Con frases como “En el banco ING Direct ya no nos falta de nada. ING ya tiene oficinas” o “Ahora, ING tiene oficinas. Lo han vuelto hacer. Se han superado”, el piloto explica a los clientes del banco que ya tienen a su disposición un nuevo canal de comunicación con el banco. Sra. Rushmore ha creado el spot, que sigue emitiéndose, ya que, aunque ING ha roto su relación con el equipo Renault, mantiene el patrocinio de Fernando Alonso. Oficinas La apertura se hará a través de un acuerdo con ING National-Nederlanden, la aseguradora de su mismo grupo, para el uso conjunto de sus oficinas. Con todo, desde ING aseguran que seguirá siendo principalmente un banco directo, ya que sus clientes operan mayoritariamente a través del teléfono e internet y sólo acudirán a las oficinas en ocasiones muy concretas en las que precisan de atención especializada (como la contratación de una hipoteca, la planificación del ahorro para la jubilación o la compra de productos de inversión), por lo que con cincuenta puntos físicos cubrirán las necesidades de sus 1,9 millones de clientes.