Envases de comida rápida llenan las calles y los parques de Noruega. De ahí que McDonald's Noruega, junto con la agencia Nord DDB, se hayan querido hacer cargo de estos problemas de basura con una campaña muy sincera y honesta que muestra el lado feo de sus envoltorios.

Fotografiados por Jói Kjartans, los anuncios reconocen que la cadena de restauración es ‘una gran parte’ del problema y presentan una bandeja de comida de McDonald's con un envoltorio de hamburguesa vacío, cajas al lado del volante de un automóvil y recipientes de bebidas dejados en algunas escaleras.

“Desafortunadamente, demasiados de nuestros paquetes y envoltorios terminan en las calles. Ahora estamos haciendo nuestro mayor esfuerzo hasta el momento y limpiaremos aún más de lo que ya hacemos, pero necesitamos que todos contribuyan. Recuerde tirar su basura en los contenedores la próxima vez que nos compre comida para llevar”, se lee en las distintas creatividades de exteriores que hay repartidas por distintos espacios urbanos del país, así como en las redes sociales.

Mari Husby, gerente senior de marketing de McDonald’s Noruega, ha explicado al portal The Drum: “Somos responsables de una de las partes más grandes y visibles de la basura. Definitivamente no estamos contentos cuando vemos restos de nuestros restaurantes tirados por ahí. Este es un gran problema para nuestras comunidades, ciudades y el medio ambiente, pero podemos cambirlo y hacerlo mejor”.

Además de llamar la atención sobre esta circunstancia a través de esta campaña OOH y digital, McDonald’s se ha unido a un proyecto piloto con Keep Norway Clean con el objetivo de prevenir la basura inconsciente.