La marca española de ropa Blue Banana sorprendió esta semana con un cambio inesperado en su identidad visual: su emblemática equis fue sustituida durante 24 horas por una circunferencia blanca sobre el nombre de la marca.
Lo que muchos interpretaron como un rebranding definitivo escondía, en realidad, una potente campaña de comunicación para anunciar una noticia importante: su certificación oficial como Empresa B Corp.
El anuncio, lanzado el martes 23 de julio a través de redes sociales, generó rápidamente conversación entre medios del sector y profesionales del marketing, especialmente en LinkedIn.
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La campaña, desarrollada junto a la agencia creativa BlackFlag, apostó por un gesto simbólico y visualmente contundente: desaparecer temporalmente su símbolo más reconocible para comunicar que la marca entra ahora a formar parte del “círculo” de empresas comprometidas con los más altos estándares sociales, medioambientales y de gobernanza.
“Conseguir la certificación y ser una Empresa B Corp significa cerrar un círculo de coherencia entre lo que decimos, lo que hacemos y lo que somos como marca. No nacimos como una empresa sostenible, pero desde el principio tuvimos claro que queríamos serlo. Hemos ido subiendo cada escalón con esfuerzo, y esta certificación es la validación de todos estos años de trabajo. Nos llena de orgullo, pero también nos refuerza el compromiso de seguir construyendo una alternativa al modelo habitual de producción y consumo en la moda actual”, comenta Nacho Rivera, cofundador y co-CEO de Blue Banana.
Qué es la certificación B Corp
La certificación B Corp, otorgada por la organización sin ánimo de lucro B Lab, se concede a aquellas empresas que superan un riguroso proceso de evaluación y demuestran un fuerte compromiso con su impacto en trabajadores, comunidad, clientes y medioambiente. En el caso de Blue Banana, supone la culminación de una trayectoria que comenzó en 2016 con una propuesta de moda vinculada a la aventura, y que en los últimos años ha evolucionado hacia un modelo de consumo más consciente.
En 2020, la compañía comenzó a utilizar algodón orgánico y poliéster reciclado. Un año después, inició la medición y compensación de su huella de carbono. En 2024, publicó su primera Memoria de Sostenibilidad y lanzó el plan Blue Banana Conscious, que incluye, entre otras medidas, la reducción anual del 5 % de emisiones de CO2 por prenda.
“Blue Banana lleva casi diez años construyendo una marca con propósito. La certificación B Corp, junto con nuestra Memoria de Sostenibilidad, no solo valida el camino recorrido, sino que marca un nuevo nivel de compromiso”, explica Juan Fernández-Estrada, cofundador y co-CEO de la firma. “Esto no es una meta, sino un impulso para seguir promoviendo el cambio dentro de la industria”.