¿Qué querías ser de pequeña?

Pasé por varias etapas: primero quise ser tenista profesional, luego pintora, más tarde psicóloga. Supongo que siempre me ha atraído entender y expresar emociones, ya fuera a través del arte, el deporte o la mente humana. Al final, el marketing tiene un poco de todo eso: se trata de conectar con las personas, comprenderlas, y generar un impacto a través de la creatividad. Una forma sofisticada de psicología aplicada, pero con KPIs.

¿Cómo cuentas o contarías a tus hijos a qué te dedicas?

Mi hija tiene solo 2 años, así que intento mantenerlo simple y divertido: “Mamá se dedica a que los coches bonitos encuentren a sus nuevos dueños y a que todo el mundo se entere de lo increíbles que son”. Si fuera un poco más mayor, probablemente le diría: “Ayudo a que Clicars cuente su historia de manera tan bonita que la gente se enamore de ella... como cuando tú eliges tu cuento favorito cada noche.”

¿En qué empresa te gustaría trabajar, aunque solo fuera por curiosidad?

Me encantaría asomarme a cómo funcionan Pixar, Patagonia o incluso Lego. Todas tienen en común un storytelling potente, una comunidad muy conectada emocionalmente y una cultura corporativa inspiradora. También me daría curiosidad una tecnológica como Spotify, por su uso de los datos con propósito creativo.

Si fueras periodista, ¿a quién te gustaría entrevistar?

Entrevistaría a mis abuelos. Creo que para entender quiénes somos, primero tenemos que mirar hacia atrás y comprender de dónde venimos. Ellos fueron emprendedores en negocios: tuvieron un pequeño comercio y también una industria de piedra artificial. Me gustaría preguntarles cómo tomaban decisiones, qué les daba fuerzas en los momentos difíciles, y cómo lograban que, a pesar de todo, la familia fuera siempre el centro. Fueron mis primeros referentes: trabajaban con orgullo, con valores sólidos y con una visión del esfuerzo que ha marcado mi forma de liderar hoy. Siento que muchas de las cosas que defiendo profesional y personalmente nacen, sin saberlo, de lo que aprendí de ellos.

¿Qué invento te parece más admirable?

La vacuna, sin duda. Es uno de los mayores logros de la humanidad: ha salvado millones de vidas, ha erradicado enfermedades y ha permitido que generaciones enteras crezcan sanas. Me emociona pensar que, gracias a la ciencia, lo invisible puede protegernos. Es una forma silenciosa y poderosa de progreso colectivo y lo hemos vivido muy de cerca recientemente.

Si existieran las puertas del tiempo, ¿a qué época del pasado te gustaría viajar?

De nuevo me dejo llevar por lo emocional. Volvería a los veranos de mi infancia, en la playa con mis abuelos, mis padres, mi hermano y mi prima. No hay briefing mejor que una conversación con ellos al atardecer, sin pantallas y con toda la presencia. Allí nacían nuestros primeros brainstormings sin saberlo: sin PowerPoints pero con toda la autenticidad del momento.

Presume de algo que se te dé bien y poca gente sepa.

¡Canto —o cantaba— fenomenal! O al menos, siempre lo he creído. Me he subido a algunos escenarios, aunque confieso que las piernas nunca dejaban de temblarme con el micrófono en la mano. Lo dejé guardado en un cajón hace tiempo, pero la pasión sigue ahí: de vez en cuando me regalo un pequeño concierto en el coche… o un karaoke con mis amigos.

¿Cuáles son las apps que más utilizas?

Uso y tengo bastantes aplicaciones en mi smartphone, sobre todo para uso  personal, como de movilidad, deporte o de viajes, por ejemplo. A nivel profesional me resultan muy útiles las apps de redes sociales donde voy detectando tendencias, nuevos influencers o noticias que luego comparto con el equipo de marketing de Clicars para inspirarnos.

¿Qué libros recomendarías leer a un estudiante que quisiera dedicarse al marketing?

Como recomendaciones concretas, “Defining Retail” de Kotler me pareció clave para entender cómo está evolucionando el mundo del retail y cómo marcas pueden adaptarse a los nuevos hábitos de consumo. Da una visión muy actual y práctica que me ha servido mucho durante la creación de la estrategia “optichannel” de Clicars donde combinamos todos los canales posibles para atender y adaptarnos a nuestros clientes. Por otro lado, “Influence” de Cialdini me ayudó muchísimo a entender cómo funciona la persuasión y cómo podemos usarla para impactar a los clientes que están buscando nuestro producto.

Alba Manzanero, en la actualidad
Alba Manzanero, en la actualidad

¿Qué campaña de publicidad te ha enamorado recientemente?

Recientemente me ha parecido brillante la campaña de Dacia "The more we see you, the less you see us".  Es una campaña enfocada en el servicio posventa con insights que consiguen, a través de un giro ingenioso y empatía, entender y transformar un punto de fricción para los clientes en una promesa de valor y de confianza.

¿Cómo es tu ocio audiovisual: qué ves y dónde lo ves?

Utilizo plataformas de streaming como Netflix para ver series y películas. Aunque las uso principalmente a modo de ocio, no puedo evitar tenerlas siempre como una fuente de insights sobre cómo evoluciona el consumo de contenido audiovisual y cómo las marcas se integran en estos ecosistemas como branded content, publicidad… 

¿En qué redes sociales estás conectado?

Como usuaria, estoy en Instagram, LinkedIn y YouTube. A nivel profesional, LinkedIn es mi favorita: me permite entender hacia dónde se mueve la conversación de marca, employer branding y el pulso del sector.

¿Cuáles son tus webs favoritas?

Sigo muchas webs de marketing para estar al tanto de todas las tendencias del sector y también de viajes, una de mis grandes pasiones. Y, por supuesto, la web de Clicars ;)

¿A qué influencers te gusta seguirles la pista?

En mi tiempo libre me gusta seguirle la pista a creadores de contenido que conectan con la realidad del día a día, como por ejemplo influencers de familia, especialmente ahora que acabo de ser madre. Valoro mucho que me saquen una sonrisa con situaciones cotidianas contadas con humor y autenticidad.

Esa canción que puedes escuchar una y otra vez.

“Fast Car” (la original de Tracy Chapman o la versión de Luke Combs). Tiene algo hipnótico y nostálgico que me conecta con etapas distintas de mi vida.

Recomiéndanos una peli, una serie y un libro.

Película: "Cinema Paradiso". Un clásico que reivindica la emoción de las pequeñas cosas, la belleza de la nostalgia y el poder del cine como catalizador de emociones.
Serie: “Six Feet Under” me fascinó por su forma poética y humana de hablar sobre la muerte y, en relación, de la vida.
Libro: "La ridícula idea de no volver a verte", de Rosa Montero. Es un texto que mezcla ensayo, autobiografía y ciencia desde una perspectiva muy honesta.

Ese país o ciudad que estás deseando conocer.

Me gustaría conocer Bután.  Es uno de los países más pequeños y con menos población del planeta y está escondido entre la India y el Tíbet. Me fascina no solo por sus paisajes y su cultura única, sino porque ha decidido medir el bienestar de su población de una manera muy especial: a través del Índice de Felicidad Nacional Bruta, considerándolo tan importante como el PIB. Me inspira la idea de un país que pone el foco en la felicidad y el bienestar de sus habitantes. Creo que, desde el marketing, tenemos mucho que aprender de esta visión: poner a las personas en el centro, y con indicadores como el  NPS, CSAT y otros, podemos medir Índice de Felicidad Bruta de nuestros clientes.